miércoles, 15 de marzo de 2017

La motivación como eje transversal en todo aprendizaje

Hace unos días conversando con una colega me comentó que estaba a punto de jubilarse,  y como le habían cesado las tareas pasivas debía volver al cargo sin tener ganas.
Le dije a ella:- "Por los niños, vas a tener que poner lo mejor de vos", a lo que ella me respondió:- "Por suerte los niños son lo suficientemente ingenuos para no darse cuenta de eso..."
Esas últimas palabras me quedaron rebotando en mi mente, a lo que vino inmediatamente la pregunta: ¿será importante o no el factor motivacional que un docente ponga en clase para la adquisición de saberes significativos?
El objetivo de este artículo es poder repensar y reflexionar sobre la práctica docente y no adentrarme en el estudio detallado del  tema. La motivación, según una revisión biográfica no es una variable observable, sino un constructor hipotético, que se infiere a partir de las manifestaciones de la conducta y esa inferencia puede ser tanto positiva como negativa.
La motivación, junto con las inteligencias y el aprendizaje previo, determinan si los estudiantes logran alcanzar los objetivos propuestos.
Sería un medio en relación a otros objetivos, convirtiéndose en el eje transversal de nuestro accionar. Es decir, el profesor ha de propiciar que el estudiante controle su propia producción y que el aprendizaje sea motivante, proceso que en su esencia es muy complejo.
La educación debe ser el fin y no el medio para cumplir los mandatos sociales.
La obra pedagógica y educativa de Durkheim nos conduce a una revisión histórica para construir los fines educativos. Este hecho social se ve bien claro en la cultura de la educación física escolar y extraescolar, formal y no formal. Pues el fin que persigue actualmente  la educación física es la educación por el movimiento.
Es nuestro deber incentivar, generar y crear en el alumno motivaciones intrínsecas que lo lleven a encontrar su propio bienestar y no hacerlo por mandato social. El sostener vos podes, permite al alumno cruzar el puente hacia el infinito y deposita en él la confianza necesaria a la que hacía alusión Schopenhauer cuando citaba " Que nadie podrá cruzar el puente hacia el infinito a excepción de ti".
Para concluir quisiera dejar dos frases de Paulo Freire, pedagogo brasileño. La misma es incluida con el fin de llamar, con posterioridad, a la reflexión:-"Lucho por una educación que nos enseñe a pensar y no por una educación que nos enseñe a obedecer." La segunda es “Enseñar exige seguridad, capacidad profesional y generosidad”

Palabras claves: Motivación, repensar, Mandato social.

Bibliografía
·        Revista cubana de Medicina General Integral. Versión online ISSN 15113038 Junio 2010
·        LE BOULCH, J. (1982). Hacia una ciencia del movimiento humano. (Trad. Lidia de France). Buenos Aires: Paidós.

·        Las cinco mejores frases de Paulo Freire. | Colectivo CEAAL El Salvador



Vanina Akman,


Profesora nacional de Educ. Física, Guardavidas nacional, Instructora especializada en el medio acuático, instructora de gimnasia acuática.

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