martes, 25 de abril de 2017

Cuerpo y Derechos Humanos reflexiones en torno a la Educación Física

Cuerpo y Derechos Humanos
reflexiones en torno a la Educación Física

En homenaje a Leonor Landaburu Zavaleta
Y a Sergio Tula Silberberg
Docente y estudiante del INEF desaparecidos durante la última dictadura militar

Introducción
“Estimada Señorita Corazones Solitarios: Tengo deiciseis años y estoy desorientada (…) Cuando era pequeña estaba acostumbrada a que los niños de mi cuadra se burlaran de mí (…) nací sin nariz. Me siento y me observo todo el día y lloro (…) por eso no puedo culpar a los chicos que no me inviten a salir. ¿Qué hice yo para merecer esta terrible desgracia? Quizás me castigaron por mis pecados. ¿Debo suicidarme? La saluda, Desesperada.”
Estigma e identidad constituyen para Goffman un par indisociable. La carta que presenta este autor, de una joven de 16 años dirigida hacia una fundación, da cuenta del proceso de construcción de subjetividad e identidad en relación a los estigmas. En este caso, un estigma desde, en y a partir del cuerpo. Es interesante el final: la muchacha no firma con su nombre, sino con la emoción que le suscita ese “anormalidad” de su cuerpo. Ese desvío del cuerpo ideal constituye su identidad más que su nombre mismo. Así, podemos suponer que la construcción social y cultural entorno al cuerpo y la constitución de subjetividad e identidad implican un mismo proceso.  
Se aproxima un nuevo 24 de Marzo. 41 años pasaron del inicio de uno de los períodos más sangrientos, tristes y dolorosos de nuestra historia. Ni guerra sucia, ni dos demonios: un plan sistemático y regional de control y disciplinamiento de movimientos subversivos que implicaron el secuestro, la tortura y la desaparición de militantes políticos. En este contexto, el artículo que sigue reflexiona acerca de la influencia de la última dictadura en el campo disciplinar de la Educación Física en Argentina. Por ello, en primer lugar, pensaremos acerca de los relatos de docentes y ex estudiantes de Educación Física acerca de la práctica del “Bautismo”. Luego, lo ocurrido en el Instituto Nacional de Educación Física durante la última dictadura cívico-militar. Finalmente, unas conclusiones finales acerca de las huellas corporales y los procesos de disciplinamiento corporal.


Bautismo y la lógica de la resistencia
Dicen que los llevaron con los ojos vendados, que los hicieron caminar hacia el río. Uno detrás del otro, tomados de una larga soga. Dicen que sintieron en su piel como les quemaba el frío de un hielo que parecía fuego.
Que sintieron como los ataban de pies y manos a las vías de un tren, que los hicieron arrastrarse por algo que se parecía a un vómito, a la mierda y la basura.
También dicen que sintieron como perdían su individualidad, cuando sus superiores les pintaban el rostro para burlarse de ellos y de ellas.
Finalmente se creyeron parte de otra especie, al ser bautizado como ¨bípedo¨.
Estos, como tantos otros relatos, formaron parte de una siniestra tradición que se llevó a cabo durante muchos años, con todos/das aquellos/as estudiantes que ingresaban a los Institutos de Educación Física.
Aunque, vale destacar que no es casual que estas costumbres, llamadas ¨bautismos¨ guardaran tanta relación con algunas prácticas que se ejecutaron durante la última dictadura militar, teniendo en cuenta que la impronta militar impregnó y marcó a los formadores que luego enseñarían en los institutos.
El 24 de marzo de este año se cumplirán 41 años del último golpe de estado militar, donde el sufrimiento, la resistencia y la tortura se hicieron presentes en los cuerpos y en las mentes de hijos, de madres, de abuelas. Pero también de estudiantes,  profesores,  maestros,  escritores,  artistas,  sociólogos,  deportistas,  almaceneros,  monjas, y de una sociedad que se animó a pensar, a cuestionar, a cambiar, a transformar una realidad con la cual no estaban de acuerdo.
A 41 años de una época oscura, donde esos cuerpos, donde esas personas resistían y soportaban, aguantando el dolor y la humillación de un ¨superior¨ que de alguna forma les daba una bienvenida, hoy podemos observar que, en la mayoría de los institutos de Educación Física, los bautismos han cambiado. Sin embargo, tanto en los discursos como en las prácticas, siguen evidenciándose dispositivos que responden a lógicas de sufrimiento y resistencia. Aún vigentes… ¿Para qué?
INEF dictadura
“La DICTADURA buscó desarrollar una educación integral que permitiera controlar la conducta para llevarla hacia un destino trascendente. Esto se lograría a través de los valores morales de la tradición cristiana y la revalorización de la identidad nacional. Entre los diversos objetivos que el gobierno militar se planteó, se puede destacar el refuerzo de las instituciones nacionales, la cultura, la seguridad, la defensa de la ley el orden.” (Beer, David (2014) La configuración de las tradiciones del Instituto Nacional de Educación Física de Buenos Aires y su resignificación en el contexto de la última dictadura militar. Disponible en http://hdl.handle.net/10469/6395)
La dictadura militar buscó disolver el sistema educativo nacional a través del mecanismo de poder represivo y discriminatorio que se trasladó a instituciones de todos los niveles. En este artículo, nos enfocaremos en lo que ocurrió particularmente en el Instituto Nacional de Educación Física (INEF). Tomaremos como referencia la tesis doctoral de David Beer, quien elabora una investigación sobre los alumnos y profesores desaparecidos durante la dictadura en ese instituto.
Dice Beer que durante la dictadura “se fue profundizando la deportivización del Instituto y de la Educación Física, en un entorno profundamente disciplinario y de control corporal.” El INEF estaba marcado por un alto predominio de la cultura deportiva. Sin embargo, durante la dictadura, el deporte no pasaba tanto por conseguir ciertos parámetros saludables sino por la confección de un cuerpo talentoso, controlado y disciplinado.
El rol del deporte durante el proceso militar tiene el ejemplo paradigmático del Mundial de Fútbol de 1978, sobre todo por el papel que tuvo para instalar la apariencia de ser un país confiable, en un momento en que ya ciertas voces en el exterior del país  denunciaban los siniestros casos de desaparición de seres humanos.
Asimismo (en contexto de los masivos #NiUnaMenos y en el mismo mes del Paro Internacional de Mujeres que aconteció el 8 de Marzo de este año), Beer muestra en las entrevistas el papel encubridor y silenciador que adquirieron las relaciones sociales dentro del INEF durante la dictadura en relación a violencia de género. Demuestra casos de violencia material (manoseos y contactos físicos) y simbólica (frases, insultos, amenazas, expresiones, señas, gestos, miradas) por parte de docentes y autoridades hacia estudiantes mujeres. El miedo (el “terror” que les infundía, como dicen algunas entrevistadas) que esto significaba no detuvo a un grupo de estudiantes que se expresaron en la rectoría, que hizo caso omiso de estas denuncias. Afirma Beer que “en el caso del Instituto, considero que las alumnas se encontraban dominadas por una dinámica discriminatoria, basada en el arraigo de los estereotipos de género, profundamente implantados en el Instituto donde encontramos posiblemente la preponderancia de un pensamiento hegemónico, de carácter androcéntrico, que presidía y hegemonizaba parte de la cotidianeidad del profesorado”. Así, en contexto militar, todo tipo de violencias, agresiones y represiones quedaban silenciadas y “legitimadas”.

Ya sea por la pretensión de buscar cuerpos disciplinados y patrióticos, ya sea por intentar imponer una ideología del miedo, ya sea por hacer desaparecer a docentes y estudiantes, ya sea por sancionar y normalizar a los estudiantes, ya sea por omisión y encubrimiento de severos casos de violencia de género en el seno del INEF, la imposición de un ejercicio de poder represivo por parte de autoridades dictatoriales en las instituciones educativas significó la educación de los cuerpos con carácter disciplinario (obediencia y utilidad), comprendiendo como mencionamos anteriormente que todo proceso de construcción de subjetividad implica mecanismos específicos de educación de los cuerpos. A través del adoctrinamiento del cuerpo, imponían violentamente sus intereses.
A modo de cierre: identidad y huellas corporales
El cuerpo es y ha sido entendido como objeto de relaciones de poder (Foucault, 2002). La educación física fue utilizada como un recurso para disciplinar los cuerpos especialmente durante la dictadura militar. ¿Cuáles serían los fines de este disciplinamiento aplicado sobre el cuerpo? Para pensar esta pregunta nos interesaría traer algunos planteos de Foucault (2002), que sostiene que el objetivo del poder es generar cuerpos que sean productivamente fuertes y políticamente dóciles. Estas características están asociadas a la construcción de cuerpos controlados y eficientes. Además, Foucault hace referencia a las técnicas de individualización del poder definidas como aquella disciplina por la cual se gobierna a las poblaciones desde el cuerpo social hasta los propios átomos sociales (individuos). Un ejemplo de este mecanismo de poder lo encarna la escuela, donde se justifica la individualización para garantizar el dominio y la vigilancia de los cuerpos. La escuela ejerció influencias sobre los cuerpos con efectos sociales y culturales determinados, orientados a desdibujar las diferencias individuales y a estimular determinadas conductas consideradas como esperadas.
Esta dinámica que intenta encauzar los cuerpos no es neutral ni ingenua sino que va construyendo una forma particular de sujeto que va a estar determinado por una serie de normas que fueron in-corporadas. Estas cuestiones responden a una lógica binaria, jerárquica que considera que existe una única forma de ser, que responde a intereses dominantes concretos, es decir al modelo hegemónico.
Las prescripciones corporales presentes en las clases de educación física de la época militar implicaron diversos ejercicios militares, como la ejecución de la marcha militar, o los castigos vinculados con la repetición de determinados ejercicios, que dan cuenta de las huellas que fueron dejando sobre los cuerpos dichas prácticas.
La Educación Física en el período de la dictadura (1976-1983) fue un instrumento que estuvo íntimamente relacionado con la normalización y el control de los cuerpos. No tenemos que olvidar que estos mecanismos que se ejercieron durante dicho momento histórico fueron poco a poco constituyéndose en hábitos naturalizados. Por esto creemos que es de suma importancia repensar ¿Cómo surgió nuestra disciplina?, ¿Cómo fue transformándose? ¿Qué elementos de aquella educación física no queremos que vuelvan a formar parte de nuestro campo disciplinar?

FRENTE ACADÉMICO- INTELECTUAL DE EDUCACIÓN FÍSICA


Prof. Cattaneo, Silvia  
Prof. Caramelo, Lucíana María 
Prof. Klein, Sebastián 

lunes, 17 de abril de 2017

LA ESCUELA SALE A LA CALLE

Todos los años en todas las Escuela de Adultos y Adolescentes del G.C.B.A. se realiza en el mes de Septiembre una muestra a puertas abierta y literalmente en la calle publicitando los ciclos y cursos que cada escuela ofrece, conmemorando la Semana del Adulto.
Como idea básica, es dar a conocer la gran oferta educativa que presentan estas escuelas de adultos y comunicar a los vecinos que estos establecimientos que durante el día reciben a niños y niñas en edad escolar, también tienen un lugar para todos aquellos que no aprenden como un niño y que deseen continuar formándose.
De esta manera, los cursos y ciclos de cada escuela de adultos preparan actividades, juegos, volantes informativos, pancartas  y demás tareas para salir a la calle y así captar la atención de los transeúntes.
En el caso puntual de nuestra Escuela Nº 15 D.E. 11º Adultos ubicada en la avenida Carabobo 253 en el barrio porteño de Flores, este evento se prepara poniendo en práctica los valores del compromiso, dedicación, solidaridad, ayuda mutua, profesionalismo y cooperación por parte de docentes y alumnos.
En este 2016, salimos a la calle el miércoles 14 de Septiembre entre las 19 y las 21hs, horario en el que funciona normalmente nuestra escuela. Cada curso armó su propio stand y preparó las siguientes actividades:
En el caso de los Ciclos, es decir, los tres niveles de la Educación Primaria, elaboraron una actividad sobre refranes populares, en la cual los participantes debían unir las distintas palabras para formar así el refrán. Ej: Al que madruga….dios lo ayuda.
En cuanto al Curso de Peluquería, prepararon una kermese en la que los participantes intervenían en juegos para acceder a distintos premios, como ser, belleza de manos, shock de keratina, brushing, planchado, peinado, etc.
La parte musical estuvo a cargo del Curso de Folklore, quienes contagiaron con melodías andinas y norteñas  a todos aquellos que pasaban por la escuela.
La profesora de contabilidad y sus alumnos nos sorprendieron con un “preguntados”.  Quienes acertaban recibían un par de entradas al Centro Cultural Borges.
Con respecto a los cursos de Idioma, es decir, los tres niveles de inglés y los tres niveles de Francés, propusieron actividades lúdicas referidas a vocabulario acercando y abriendo el interés por el idioma extranjero.
Durante todo el gran evento en la calle, y en particular en esa noche fría del 14 de Septiembre alumnos junto a su profesor de Cocina nos deleitaron con chocolate caliente.
Creemos importante destacar que todas estas actividades fueron hechas por amor al arte, sin intereses económicos, y con el esfuerzo mancomunado pensando en la integración e inclusión de todos.
Por una Escuela que todos los días crezca, por hacer, a partir de eso, una sociedad más justa seguimos pensando en que las utopías dejen de ser tal, para convertirse en realidad!

Romina Echaide – Maestra Secretaria Escuela Nº 15 D.E. 11º Adultos

Verónica Gurevich – Directora Escuela Nº 15 D.E. 11º Adultos






miércoles, 5 de abril de 2017

El desafío de incorporar las TIC

Vivimos en una Sociedad que está inmersa en el desarrollo tecnológico. Cada vez nos encontramos con nuevas y más avanzadas tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Las mismas están presentes en la sociedad en general, y en la educación en particular, y han dando lugar a profundos cambios socioculturales.
            Mi desafío es acercar experiencias para demostrar que se pueden integrar a cualquier nivel educativo, incluso al Jardín Maternal, establecimiento educativo al que muchos subestiman por tratarse de trabajo con niños pequeños.
            Existen muchos maestros que no innovan y las razones son variadas. No incorporan las TIC porque no saben cómo hacerlo; las creen innecesarias; no están convencidos de que  mejoran en la calidad educativa; desconocen cómo usarlas lo que les provoca miedo, indiferencia o rechazo; no cuentan con ayuda o apoyo de otros maestros y/o en el Equipo de Conducción.
En el Jardín Maternal, los niños y las niñas no sólo son asistidos (alimentación, sueño, cuidado, higiene) sino que también aprenden a través de juegos y de rutinas, ayudando así a que se desarrollen integralmente. Entonces cumple una doble función: asistencial y pedagógica, acciones conjuntas que se complementan. El cuidado es parte fundamental en la educación. A veces nos encontramos con familias que llegan al jardín pensando es una guardería, donde los niños sólo son atendidos asistencialmente.
Muchos subestiman al nivel suponiendo que no pueden adquirir conocimientos en el mismo. La Ley Nacional de Educación (Ley 26.206) sostiene que aprender y enseñar es un derecho garantizado por el Estado Nacional. Este último, tiene la responsabilidad de proveer una educación integral permanente y de calidad. Entonces, si las TIC son herramientas que mejoran la calidad educativa y el jardín Maternal es parte del sistema educativo ¿Por qué no integrarlas al currículo?
Acercar las TIC desde la cuna es una de nuestras funciones para colaborar a que los niños, las niñas y sus familias no queden excluidos. Gladys Acosta Vargas (2008) sostiene que las mismas “pueden modificar el proceso de enseñanza y aprendizaje, debemos partir de la base de que hoy un ciudadano que no maneje las nuevas tecnologías de la información, tiene muchísimas posibilidades de quedar excluido”.
Pero no sólo basta con incorporarlas: por más que cambiemos el currículum no logramos modificar lo que pasa en la clase. Los verdaderos sujetos de cambio son los maestros, los que planifican y hacen la tarea diaria. Ellos tienen que estar convencidos que las TIC mejoran la calidad educativa, y sobre todo, tienen que conocerlas, saber utilizarlas y adaptarlas a las actividades.
            Pero con el sólo hecho de incorporarlas no se producen cambios automáticamente. Lo primero que hay que trabajar está relacionado al maestro. El mismo tiene que alcanzar competencias que les permitan usarlas e integrarlas a sus propuestas. Siempre es complejo incorporar lo nuevo, es un desafío para nosotros y no se puede optar por integrarlas o no, porque forman parte de nuestra realidad y están entre nosotros, nos guste o no.
Entonces ¿Cómo lo trabajamos en el Jardín Maternal? Hace tiempo empezamos a integrarlas, tanto en el aula como para la comunicación con las familias. De igual manera, el Equipo de Conducción fue implementando herramientas tecnológicas para una gestión escolar más eficiente.
En principio, comenzamos a usarlas en las últimas reuniones de padres, para que los mismos observaran cómo se trabajó en la sala. A través de un Power Point, mostramos fotografías de proyectos acompañadas de la fundamentación escrita y los padres se llevaban un CD con el video. Actualmente utilizamos el mismo programa para explicar el Proyecto Escuela, a comienzos del año. Además, hemos implementado el uso de un Blog cerrado con un “Diario de experiencias” en donde publicamos fotos, comentarios, videos de los proyectos áulicos y audios como las canciones que cantamos en las fechas patrias. Para ello, recogemos material utilizando cámaras y  celulares, tecnologías que tenemos a nuestro alcance. Las familias se manejan a través de WhatsApp y, en ocasiones, le pedimos que comuniquen determinada noticia al grupo.
Jerome Morrissey (2008) afirma que “En la actualidad, la posesión de teléfonos celulares es casi universal. Al incorporar nuevas características y funciones, el teléfono celular ya se ha convertido en una computadora de mano. Los estudiantes los usan constantemente como herramientas de comunicación y de archivo de información, pero también como organizadores personales y para bajar información de Internet”.
En el aula, quisimos enriquecer los escenarios lúdicos con las TIC para poder hacer que estos ambientes de aprendizaje sean más atractivos y que colaboren con una educación integral y  de calidad.
Con el proyecto “Identidad”, mostramos fotografías de los niños y las niñas tomadas en las distintas etapas: lactarios, deambuladores y sala de dos años. Armamos así un “banco de imágenes” donde se observa el crecimiento de cada niño/a. El mismo ayuda a identificarse e identificar a los compañeros, nos permite recordar situaciones, proyectos, actividades compartidas con las familias, rememorar a otras maestras, entre otras cosas.
Este trabajo se relaciona también con el proyecto “Nos comunicamos” en donde pretendemos que desarrollen el habla a través de la observación de fotografías y el juego con distintos elementos para la comunicación y la expresión, materiales como teléfonos fijos, celulares, teclados, cámaras fotográficas, mouses, parlantes de computadora, elementos de cocina, ropa, pelucas, bebotes, cochecitos, carteras, carritos de compra, etc. Este juego de dramatizar situaciones desarrolla le imaginación y el habla. Además, a principios de año, en el Período de Inicio, propusimos un taller para que los padres construyan aparatos tecnológicos utilizando material descartable (monitores, computadoras portátiles, teléfonos, teclados, cámaras de fotos, etc.), y luego, los agregamos a nuestros juegos.
            En el proyecto “Nos conocemos” trabajamos en las actividades de cuidado cotidiano (higiene, alimentación y descanso), trasmitiendo conocimientos (por ejemplo, cantando una canción y señalando algunas partes del cuerpo en el momento de higiene de manos y cara) e incorporando en el juego conversaciones acerca de qué órganos y partes del cuerpo usamos con determinada TIC. Paulatinamente iban nombrando la parte del cuerpo utilizada, lo que ayudó también a desarrollar su lenguaje.
A modo de conclusión, puedo decir que, la incorporación de las TIC en la educación es sin duda uno de los grandes desafíos al que nos enfrentamos. Las mismas son necesarias como inclusión y achicamiento de la brecha digital entre los sectores poblacionales, y también para la mejora de la calidad educativa.
La Ley de Educación Nacional contempla una educación integral y de calidad. La integración de las TIC nos permitirá entonces enriquecer el trabajo en las aulas y así, mejorar nuestra tarea.
Encontramos variadas TIC a nuestro alcance. El desafío es pensar la manera de integrarlas para ayudar en la adquisición de conocimientos. Recordemos que el sólo hecho de su uso o instalación no cambia necesariamente los modos de enseñar y aprender.

Como docentes podemos capacitarnos para reflexionar en conjunto, buscar estrategias, debatir, ensayar, permitir equivocarnos, con el fin de integrarlas de la mejor manera posibles a nuestras propuestas pedagógicas. La tarea es compleja, porque son tecnologías novedosas, porque cuentan con muchas funciones. Es un desafío que debemos afrontar en esta hermosa tarea de educar, tarea que hace tiempo hemos elegido para nuestra vida.




Mercedes Yanez, prof. Educación Física


martes, 4 de abril de 2017

TEAyudamos a nadar “El Desafío P” Una apuesta a la inclusión

Somos Vivian Mouratian y Yanina Figueroa profesoras de Educación Física del Centes N° 2 D.E. 9.
A continuación contaremos nuestra experiencia durante este año con un alumno  al cual llamaremos niño P.
Este niño de 9 años presenta trastorno del espectro autista severo, con dificultad para armar trayectos de espera, se lanza desbordado, se desplaza permanentemente por todos lados, se fuga, le cuesta mucho permanecer en los talleres, además al no poder comunicarse verbalmente muerde y pellizca.
Este año decidimos incluir al niño P. al plan de natación a pesar del riesgo que ello implicaba. Este fue nuestro gran desafío como dice el título “El desafío P”.
El trabajo entre varios es un punto clave, cuando decimos varios nos referimos al apoyo y confianza por parte de la Dirección del Centes, las ganas nuestras y de las referentes, la ayuda del equipo interdisciplinario, psicomotricista, TO, la buena predisposición del chofer de la combi, la médica del natatorio y el personal de la pileta. Todo este trabajo en equipo nos permitió pensar  y modificar estrategias para que la propuesta no fracasara. El primer día de pileta pedimos autorización a la coordinadora del Plan de natación para que nosotras las profesoras de Ed. Física del Centes pudiésemos ingresar al agua con los niños. Con el permiso concedido comenzó nuestra apuesta a la inclusión. Acordamos con las referentes del niño P armar el dispositivo para que él pudiese llegar al medio acuático, primero subir a la combi, ir en 2 combis distribuyendo a los niños según sus características para evitar inconvenientes. En el traslado al natatorio ajustamos siempre el llegar puntual ya que P presenta dificultad en las esperas, tomando este recaudo evitamos problemas.  En el ingreso al predio realizamos siempre el mismo recorrido, caminar hasta la puerta del vestuario, pasar por éste hasta llegar al sector de cambiado, permanentemente contándole y anticipándole donde nos dirigimos. Cuando el niño P observa la pileta automáticamente  se saca la ropa por este motivo siempre tenemos que llegar para inmediatamente cambiarse e ingresar al agua. Ya en el espacio de cambiado se saca la ropa, le indicamos  ponerse la malla, ojotas, toalla y guardar en la mochila todo. De la mano de su referente y de la  profesora de educación física del Centes  camina hasta la pileta para ingresar al agua bajando la escalera. Ya desde la primera clase P logró ingresar sin inconveniente al agua siempre acompañado por prof. del Centes haciéndole cuerpo, el excelente vínculo  favoreció la propuesta. Ya en el agua P salta y esboza una sonrisa enorme de disfrute, no se moja la cara ni el pelo, observa a un grupo de personas nadar. Con el transcurso de las clases de natación y el trabajo en las clases de educación física en el Centes el vínculo se fortaleció aún más con nosotras  lo cual   permitió que P cada clase lograra mayor conexión, no solo visual sino también corporal, estimulando y planteando situaciones significativas, valorando sus logros, felicitándolo, buscando permanentemente su mirada, el abrazo, la caricia, el poder guiar sus movimientos para que imite, potenciando sus habilidades para que encienda sus sensaciones. Por medio de elogios y halagos, festejando cada logro, siempre apostando a incorporar palabras, ya que cuando el niño se encuentra en un momento de disfrute logra repetir por ejemplo si salta en el agua decimos saltar, saltar, saltar y el repite, si está pataleando decimos nadar, nadar o decimos agua, agua, en esos momentos es donde más logra emitir palabras o sonidos. La prevención, la anticipación  y el estar siempre atentas son fundamentales para evitar inconvenientes, por ejemplo cambiarle el foco de atención, trabajando con la singularidad del niño. Siempre efectuamos los mismos recorridos desde el traslado en la combi, hasta el ingreso al agua. P ha progresado mucho por ejemplo  al comienzo no se mojaba la cara, ahora la sumerge, sopla el agua se moja el pelo, se desplaza caminando por toda la pileta, salta, mueve mucho los brazos, grita de alegría, se ríe, se deja llevar por nosotras en cúbito dorsal y ventral, patalea, utiliza una tabla, flota flota, lanza pelotas, puede salir del agua e ingresar utilizando una goma eva muy grande como tobogán, se desliza con ayuda logra permanecer los 40 minutos en el agua hasta que le decimos vamos P tenemos que salir y sin inconveniente sale de la mano, se pone las ojotas, la toalla y junto a las docentes del Centes se dirige para vestirse. El niño P particularmente  en el medio acuático es donde se siente más a gusto son 40 minutos de placer y de paz para él. Y es allí donde aprovechamos para incorporar palabras, hacer contacto visual, corporal y conectarnos un poquito más. El día de la clase abierta donde se invita a todos los padres, la mamá de P asistió, cuando el niño la vio salió de la pileta a buscarla, quería que ella también ingresara al agua, insistía, insistía, le dijimos “mamá no tiene malla” entonces volvió al agua, la mamá observó muy contenta como su hijo se desplazaba, jugaba, la conexión del niño con la prof. la felicidad de su hijo en el agua, la sonrisa, los gritos de alegría etc. El abrazo de la mamá cuando salimos del agua y un gracias enorme nunca lo olvidaremos. Una caricia al esfuerzo, un premio a la perseverancia y constancia de varios, que adaptando actividades, armando, pensando y creando y sobre todo respetando la singularidad del niño demostramos que cuando se quiere se puede.
No fue fácil en ocasiones hubo que afrontar rechazo y discriminación de parte de otros, pero siempre con una sonrisa esquivamos estos obstáculos, reafirmando  nuestra tarea. El esfuerzo vale la pena, el resultado, la sonrisa, el placer de ver lo que siente P en el agua, es único donde además de aprender por medio del juego logra desarrollar sus habilidades motoras y se enriquece desde lo físico, psíquico y social.
El medio acuático permite el desarrollo  psicomotor, favorece la relajación y el bienestar de los niños por eso y por nuestra experiencia consideramos que sería sumamente importante que el plan de natación se pudiese ampliar a 2 o más días a la semana, y que en el futuro se construyeran piletas dentro de los Centes, lo cual beneficiaría muchísimo a todos los niños. Cabe destacar que junto al niño P 10 niños más del Centes con sus particularidades también disfrutan cada semana de las clases y en ellos también se observan muy buenos resultados. Nos jugamos por la inclusión, apostando  a eso cada día por una sociedad inclusiva y con igualdad de oportunidades para todos.
A veces los niños con autismo no nos miran a los ojos, pero creemos que ellos nos pueden mirar más allá de los ojos, nos pueden mirar el alma. Cuando nosotros los valoramos y aceptamos como son creemos que  lo perciben y nos permiten aprender mucho de ellos.

Ser profesoras de Educación Física  nos permite enseñar por medio del cuerpo y el movimiento, ayudando a que cada niño pueda alcanzar su máximo potencial. Disfrutamos de cada logro, nos emocionamos viéndolos felices  como siempre decimos “vamos por más”. 

Vivian Mouratian prof. de Educación Física
Yanina Figueroa prof. de Educación Física